La cuñada de Lorena Durán Herrera, la primera trabajadora del ámbito de la Salud que murió a causa del coronavirus en el país, denunció una deficiente atención en el Hospital de Pitrufquén, donde acusó que no quisieron hacerle el examen PCR para detectarle el COVID-19 a tiempo. “No le hicieron nada, entonces para mí es una negligencia médica”, declaró.
Teresita Contreras, cuñada de Lorena Durán Herrera, la mujer que el día jueves se convirtió en la primera fallecida por COVID-19 entre los funcionarios de la salud, acusó una negligencia médica que podría haberle causado la muerte.
En contacto con el matinal de Canal 13, la entrevistada señaló que “fue negligencia médica lo que pasó con Lorena, lamentablemente es así, porque yo creo que, al tenerla dos semanas enferma en su casa, ya es una negligencia”, comenzó.
“La llevaron al Hospital de Pitrufquén, y no el hicieron el examen cuando ya teníamos acá el COVID- 19 en la región, no le hicieron nada, entonces para mí es una negligencia médica”, añadió.
La cuñada de Lorena prosiguió su relato confirmando que “mis sobrinas son negativo, no tiene coronavirus, mi hermano sí, pero él está en su casa, es pasivo”.
“Supo porque quería empezar a trabajar en marzo, el llamó a su jefe para decirle que quería trabajar y recién ahí él se hizo el examen, porque cuando terminaron la cuarentena tampoco les hicieron el PCR. Ellos pidieron que les hicieran el examen, para poder andar tranquilos, lo cual se negaron”, agregó.
Cerró expresando que “quiero agradecerles, nosotros como familia, a todas las personas que estuvieron acompañándonos durante todo el tiempo que estuvo Lorena, más de un mes en el hospital”.