“Estimo necesario salir de nuestro habitual silencio institucional y dejar de ser leídos a través de nuestras sentencias. Son momentos en que es necesario decir algo sobre la Constitución que nos rige y respecto de la cual se nos ha encomendado su control”, dijo la ex asesora del Presidente Piñera, María Luisa Brahm, para explicar su inédita declaración.
Un punto de prensa inédito convocó la presidenta del Tribunal Constitucional, María Luisa Brahm, en medio de la controversia entre el Gobierno y el Congreso por la admisibilidad de los proyectos que tienen en estado de máxima tensión las relaciones entre ambos poderes del Estado.
“Estimo necesario salir de nuestro habitual silencio institucional y dejar de ser leídos a través de nuestras sentencias. Son momentos en que es necesario decir algo sobre la Constitución que nos rige y respecto de la cual se nos ha encomendado su control”, dijo la exasesora del Presidente Piñera, para explicar su declaración titulada “Respeto integral a la Constitución”.
En lo medular, el texto de Brahm se alinea con el llamado formulado el lunes por el Mandatario a ceñirse a la Carta Fundamental cuando arremetió contra el Congreso a señalar que “muchas mociones de parlamentarios pudiendo estar bien inspiradas” son inconstitucionales, y anunció la formación de una comisión ad hoc para zanjar la controversia por las prioridades legislativas.
En su intervención, donde solo dio lectura al documento y no respondió preguntas de la prensa, la abogada recalcó que “respetar la Constitución no es solo función de un tribunal. Es obra colectiva de convivencia sobre la cual construimos un Chile mejor. Por eso aspiramos a una obligación sencilla: respetemos integralmente la Constitución. A eso convocamos a todos los poderes del Estado y a todos los habitantes de nuestro país”.
Brahm añadió que “la Constitución, reflejada en su texto y sus 47 leyes de reforma constitucional (…) han sido la base para el desarrollo de nuestro Estado democrático (…) Este proceso representa la vía institucional con la cual se hace frente a los desafíos que el país va teniendo en cada ciclo de su historia”.
De acuerdo con la presidenta del TC, “las Constituciones deben ser más fuertes cuando más se las necesita. En tiempos de normalidad los dilemas constitucionales son menos importantes, pero en las encrucijadas, los textos fundamentales sirven para guiar y prevenir los conflictos sentando las bases de su solución”.
“Hoy en la Constitución están las reglas que permiten guiar el futuro. Si se debilitan, no se respetan o se declaran muertas, dicho futuro se ensombrece. Este es el momento en que debe regir más que nunca el orden constitucional que nos hemos dado”, finalizó.
Fuente: El Mostrador