Los 12 internos, que llevan 8 días en huelga seca y más de 50 días en huelga de hambre, fueron agredidos, desalojados, y trasladados por la fuerza hasta el hospital de Los Ángeles.
Esta madrugada, alrededor de las 2.00 hrs, un grupo antimotines de Gendarmería ingresó al módulo de los presos políticos mapuche (PPM) de la cárcel de Lebu, realizando un violento allanamiento y posterior desalojo. El motivo, según la unidad penitenciaria, era el traslado de los 12 internos al Hospital de Los Ángeles por problemas de salud.
Este acto de represión, que ocurre tras 8 días en huelga seca y más de 50 días en huelga de hambre, también afectó a los familiares de los presos de los territorios Lafkenche que se encontraban en un campamento levantado al costado del penal. Estas personas fueron atacadas mientras se manifestaban contra de la violencia ejercida en contra de sus familiares al interior del penal, y que culminó con dos mujeres mapuche, familiares de los PPM, en el Hospital Santa Isabel de Lebu.
«Llegaron tres carros antimotines de Gendarmería y por la ventana del módulo comunero las familias pudieron presenciar como Gendarmería entró al módulo, los golpeó, los redujo mediante la fuerza y después se los llevaron trasladados», señaló Auka Castro, werken y vocero de los huelguistas.
Inicialmente se informó que los doce prisioneros políticos estaban «siendo trasladados por la fuerza hasta el hospital de Los Ángeles”. No obstante, más tarde trascendió que la intención de Gendarmería habría sido -en realidad- alimentar a los presos políticos mapuche por la fuerza para obligarlos así a deponer la huelga de hambre.
Finalmente, otros reportes aseguraban que los prisioneros mapuche serían trasladados a la Cárcel El Manzano de Concepción, desconociéndose por completo el motivo de tal situación.