Si bien el Ejército no tiene atribuciones policiales ni funciones de enfrentarse a disturbios, como podría ser mal calificada una protesta, su «Jefatura de Adquisiciones de la División Logística» presentó una licitación pública para la compra de 130 de estas armas semiletales, calibre 12, de bolas de acero cubiertas de goma.

Esta semana, la «Jefatura de Adquisiciones de la División Logística» del Ejército anunció una licitación para la compra de 130 escopetas antidisturbios, un tipo de armas semiletales, calibre 12, de bolas de acero cubiertas de goma. Esto a pesar de que esta institución no cuenta formalmente con atribuciones policiales, ni debe cumplir funciones de enfrentarse a «disturbios» en democracia. Un término con el que suelen calificar erróneamente a las protestas.

La notificación de futura compra, ofertada a través de la plataforma mercadopublico.cl, surge tras una serie de jornadas de movilizaciones populares el pasado 2 y 3 de julio. Además, se licita en plena crisis sanitaria, priorizando este tipo de gastos sobre cualquier tipo de gasto público para seguridad social.

«Las escopetas calibre 12 tendrán una recámara de 76 mm y su cañón podrá contar con una longitud entre 465 a 800 mm. El peso del arma no deberá exceder los cuatro kilos y la longitud total será inferior a 1.250 mm», detalla el portal Infodefensa.com.

Precisamente, un tipo de armamento semiletal que ya causó cientos de lesiones (de leves a graves), mutilaciones oculares, e incluso muertes, durante la revuelta popular iniciada el 18 de octubre del año pasado.

Esta no es la primera vez que el Ejército realiza una compra de este tipo. Otra similar fue realizada el 20 de octubre, a dos días de haber iniciado el Estallido Social y dos horas antes que Sebastián Piñera declarara la guerra contra el pueblo de Chile calificándolo como «un enemigo poderoso». En ese momento, se adquirieron de forma urgente 36 mil cartuchos antidisturbios (orden de compra N°3376-192-SE19) y al día siguiente, 21 de octubre, 20.000 cartuchos explosivos antidisturbios (orden de compra N°3376-195-SE19), según reveló Ciper.

Por otro lado, la licitación va en la misma línea de una realizada por la Armada en enero para la compra de equipamiento semiletal y materiales antidisturbios por cerca de 200 mil dólares. Entre ellas, 75 de las mismas escopetas calibre 12 de las mismmas que ahora licitó el Ejército, más 35 fusiles semiletales, 85 cascos balísticos, 18 escudos balísticos y 215 protectores faciales adaptables a cascos con riel.

Compartir: