Los datos han sido facilitados por de la Agencia Federal de Prisiones del país norteamericano.
Más del 70 % de los reclusos en cárceles federales de EE.UU. que se han sometido al test del covid-19 han dado positivo, según los últimos datos de la Agencia Federal de Prisiones del país norteamericano (BOP, por sus siglas en inglés), informó este miércoles AP.
La agencia detalla que de 2.700 pruebas realizadas en todo el sistema penitenciario, casi 2.000 han resultado positivas, lo que sugiere que hay muchos más infectados sin detectar. El dato contrasta con las declaraciones de funcionarios, que hacen hincapié en que los niveles de contagio y de mortalidad de la nueva enfermedad dentro de las cárceles son inferiores a los registrados en el exterior.
Críticas
La respuesta de la BOP a la creciente crisis del nuevo coronavirus en las cárceles ha suscitado críticas entre los abogados y legisladores, ya que algunos cuestionan si la agencia está haciendo lo suficiente para garantizar la seguridad de los casi 150.000 reclusos que hay en las cárceles federales de EE.UU.
Un hombre llamado Michael Fleming contó a la agencia de noticias que su padre falleció el pasado 19 de abril tras serle diagnosticado covid-19 en una cárcel de Los Ángeles, donde cumplía una condena relacionada con drogas, aunque no se le comunicó la causa de la muerte y tuvo que enterarse a través de los medios. Al menos la mitad de los presos de ese centro penitenciario ha dado positivo al virus.
El joven ni siquiera fue informado de que su padre había contraído el covid-19, algo obligatorio cuando los reclusos tienen enfermedades graves.
¿Se hace todo lo posible?
La asesora principal de la BOP, Kathy Hawk Sawyer, ha salido al paso de la polémica, afirmando que están haciendo todo lo posible para mantener seguros a los presos en plena pandemia, conforme a las pautas establecidas por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Desde finales de marzo y hasta este miércoles, 31 reclusos han fallecido por el nuevo coronavirus en cárceles federales estadounidenses, mientras que unos 600 se han recuperado.
La semana pasada, la BOP consiguió más de 5.000 kits de prueba, mientras trata de proveerse de mascarillas, jabón y desinfectante para que los funcionarios de prisiones puedan hacer frente a la crisis sanitaria de la mejor forma posible.