El contexto de pandemia no ha sido justificación para detener las protestas que se han desatado en diferentes países. Tras el asesinato de George Floyd, se han desencadenado masivas manifestaciones a escala mundial, donde si bien el epicentro de la revuelta se encuentra en Estados Unidos, países como Francia, Grecia, España e Inglaterra también han sido escenario de la protesta social. En este marco de indignación general, México se ha sumado al fenómeno tras un nuevo caso de violencia policial: la muerte de Giovanni López.
El pasado 04 de mayo, Giovanni López, albañil de 30 años de edad, fue detenido violentamente por agentes de la policía municipal de Ixtlahuacán por causas que aún son difusas. Según los primeros trascendidos, presuntamente habría estado sin mascarilla.
Tras no tener noticias de él, su familia asistió a la comisaría el 05 de mayo en búsqueda de su paradero, donde fueron informados de su traslado al Hospital Civil de Guadalajara, lugar en el que finalmente falleció el mismo día.
La familia, consiga el medio Deutsche Welle (DW), dio cuenta de la presencia de marcas de golpizas y un tiro de arma de fuego en su pierna izquierda, razón por la cual se han abierto investigaciones en contra de los policías involucrados.
La Oficina en México de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos (ONUDH) a instado a las autoridades a «realizar una investigación pronta, efectiva, exhaustiva, independiente, imparcial y transparente«, proceso que ya se encuentra liderando el fiscal del Estado de Jalisco, Gerardo Solís Gómez.
Tras un mes de silencio y olvido por parte de las autoridades, donde los policías involucrados no han sufrido consecuencia alguna, miles de manifestantes se han volcado a las calles a protestar. El foco de la movilización se encontró en Guadalajara, donde se logró ingresar a la sede del Gobierno estatal. Paralelamente, se desarrollaron fuertes enfrentamientos con la policía, saldando la jornada con patrullas incendiadas, rayados en el Palacio de Gobierno y decenas de personas detenidas.
En este contexto, el gobernador Enrique Alfaro ha sido flanco de duras críticas por parte de la población debido a la inoperancia en el manejo del caso, además de ser acusado de un ‘oportunismo político’ que ha quedado demostrado en el desarrollo de la pandemia producto de la Covid-19.
Fuente: Resumen